domingo, 4 de noviembre de 2012

Paz y amor.

El viernes subí a las nubes y hoy he vuelto a poner los pies en la tierra. Como una gran metáfora la niebla envolvía la casa. En medio de la montaña he dejado de ser para ser realmente yo durante dos días. Me he conectado conmigo, con la madre Tierra, con la creatividad de mi ser y he escuchado el silencio. El humo, la niebla, el vapor me han trasladado al paraíso. Al desconectar con el mundo material he conectado con el interior y ha sido brutal. Ahora solo espero que llegue la siguiente vez. Ojalá alguna vez lo experimentéis. Ojalá el amor que siento os penetre y se quede para siempre la paz. Ojalá haya llegado realmente la nueva era para todos.




Aquí todo es ruidoso, pero algún día me iré y viviré para siempre en las nubes. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario